Centro de Interpretación de la Naturaleza

                                           Con la visita a esta instalación aumentaremos los conocimientos sobre nuestro ecosistema y comprenderemos mejor todo lo bueno que nos puede ofrecer. De una forma lúdica descubriremos la vegetación, la fauna y los sistemas ecológicos de la Comarca del Noroeste, además de los usos humanos, la historia y la cultura ancestral de nuestra tierra. Lo más importante es, que un paseo por las salas del Centro, nos sirve para apreciar más el entorno que nos rodea, a respetarlo y contribuir a su conservación.
CentroInterpretacionNaturaleza03iiEl Centro de Interpretación de la Naturaleza se encuentra ubicado en el interior de un edificio del s. XVI conocido como Torreón de los Templarios, posiblemente erigido sobre uno anterior de origen templario, de ahí su nombre. No podría situarse en mejor lugar que en el bello Paraje de Las Fuentes del Marqués, tan querido por todos, en el que podemos relajarnos paseando y disfrutando de sus manantiales cristalinos.
La visita al Centro de Interpretación de la Naturaleza transcurre por diferentes salas: “Sala del Noroeste”, “Sala de Los Arcos”, “Sala de los Secretos” y “Sala de los Árboles”.
A través de ellas conoceremos la Comarca del Noroeste, su geología, y otros detalles tan intPSJ-FTMQ043eresantes como las consecuencias del fuego en nuestros bosques; conoceremos mejor el buitre leonado, la cabra hispánica y el águila calzada. Además descubriremos los mejores atractivos de Caravaca, como las Fuentes del Marqués, y el agua como fuente de cultura y de vida. También podremos descubrir las especies arbóreas más importantes de la zona, y algo tan interesante como ver cómo surge un nuevo hábitat para otros seres vivos a partir del árbol muerto.
Todo ello en una visita relajada y activa, en la que se ofrecen al visitante sugerencias, informaciones, y sensaciones para que cada uno pueda “interpretar” la realidad que le rodea.
¡¡Anímate a venir!!
Reserva: Tlf. 968 70 56 20

Camino del Huerto

                         Aún apetece salir a disfrutar del aire libre y de la naturaleza. En Caravaca de la Cruz existe un lugar ideal para llevar a cabo esta actividad, se trata del Camino del Huerto, un entorno queridísimo por todos los habitantes de la ciudad.
Su ubicación, hace posible que en pocos minutos pasemos del casco urbano al campo mediante un paseo tranquilo. Este camino sirve de enlace entre “dos mundos”, el del bullicio de los coches, del asfalto y los edificios con el del cantar de los pájaros, la tierra y el agua, los árboles y plantas, etc.
Entrada redEl Camino del Huerto a lo largo de todo su recorrido se encuentra rodeado por un río de agua cristalina y por altos y frondosos árboles que en verano dan sombra a los bancos que hay por todo el paseo.
Si paseamos por el Camino del Huerto no iremos solos, lo haremos acompañados de las montañas de Caravaca de la Cruz, entorno a las cuales existe una leyenda, que cuenta que dichas montañas en realidad son un gigante, el gigante “Todmir”, que esta dormido, pero que si algún día la ciudad se viera en peligro se levantaría para defenderla. Si observamos con atención la silueta de dichas montañas, ésta puede sugerirnos la figura de un gigante acostado.Camino del Huerto 3 red
Este entorno que os describimos es idóneo para el esparcimiento de grandes y pequeños, en cualquier época del año, siendo el verano la época de mayor disfrute.
El final de este camino, está señalado por unos pivotes, pero si decidimos traspasar estos, encontraremos un sendero que nos conduce hacia el Paraje Natural de Las Fuentes del Marqués.

¡¡Un bonito paseo, sin desperdicio alguno!!

Las Tosquillas de Barranda

               Las Tosquillas es un paraje natural que está situado a un kilómetro de la pedanía caravaqueña de Barranda, enclavado entre dos cerros.
En el lugar encontraremos una gran variedad de vegetación, así como el nacimiento de agua natural que le da nombre y que invita a que la imaginación viaje al tiempo de las bellas leyendas que circulan sobre estos lugares.
Entre sus grandes nogueras se encuentra un merendero donde los caminantes se acercan para pasar un rato tranquilo con su familia y amigos.
En Las Tosquillas, el agua brota de una grieta entre dos enormes rocas y a potente ritmo, y discurre aguas abajo por una acequia, este espacio natural, el fresco y limpio aire despeja la mente.
A esta fuente de las Tosquillas, como hemos dicho antes, se le atribuye una preciosa leyenda, “La Dama del Agua” o “La Encantá” de Las Tosquillas.Las Tosquillas 12

                   Y la leyenda dice así:

Hace mucho tiempo, en el Castillo del Cerro de La Cabezuela vivía un señor que con frecuencia viajaba a la zona para recoger los diezmos. Una de esas veces, el señor se instaló junto a su mujer y su hija (la niña Juana) en el cerro. A la familia la visitaba a menudo un hombre de apariencia extraña y con mucha influencia sobre el señor de La Cabezuela, al que los vecinos se referían como alquimista.
Las Tosquillas 3 La niña fue creciendo y se convirtió en una doncella hermosísima de la que se enamoró el alquimista, pero Juana estaba prendada de Juan, el mozo que cuidaba los caballos de su padre. Un día, el alquimista paseaba por Las Tosquillas cuando sorprendió a Juan y a Juana abrazados, y montó en cólera. Mediante magia, consiguió destruir a Juan y a ella la convirtió en la dama del agua y le encomendó la función de preservar el preciado líquido para generaciones venideras. Sólo dos opciones tenía la joven para romper el encantamiento. La primera era que debía encontrar, en la noche de San Juan, una pareja que se amara de verdad. Para ello, Juana ofrecía a los amantes joyas de oro con el fin de desvelar que lo que compartían no era amor verdadero, y si los bienes materiales no les tentaban, la joven se ofrecía con toda su hermosura. La otra opción sólo se le presentaría cada 100 años, cuando un hilo de lana rojo descendería por el nacimiento representando su propia sangre.

Así que, si se acercan a disfrutar de este mágico paraje, quizá tengan la oportunidad de liberar a la “encantá” de Las Tosquillas. Si es así, no corten el hilo rojo.